lunes, 29 de septiembre de 2025

PREMIO ESPECIAL LIV COLOQUIOS HISTÓRICOS DE EXTREMADURA

    El pasado sábado 27 de septiembre, en Trujillo, tras finalizar la exposición de las 30 ponencias presentadas a la LIV edición de los Coloquios Históricos de Extremadura, nuestro trabajo titulado "La primera vía de comunicación moderna del Valle del Jerte (la carretera de Plasencia a El Barco de Ávila) y sus precedentes históricos (Camino Real y caminos de herradura)", recibió, ex aequo, el Premio Especial LIV Coloquios Históricos de Extremadura.

Fotografía de organizadores y premiados. Trujillo, 27 de septiembre de 2025. Diario HOY.

    El trabajo de investigación presentado se divide en dos grandes bloques de contenido. Por una parte, el que aborda los caminos históricos, utilizados por lugareños y viajeros, que han transcurrido por el Valle del Jerte desde hace siglos (Camino Real y caminos de herradura) y que han conectado sus poblaciones así como esta comarca con espacios vecinos (el Ambroz, la Vera o Castilla). Por otra parte, el segundo gran bloque de contenidos trata los aspectos más singulares de la construcción de la que fue la primera vía de comunicación moderna que transcurrió por la comarca: la carretera de Plasencia a El Barco de Ávila (actual N-110), cuyas obras comenzaron en las últimas décadas del siglo XIX, así como sus elementos más destacados (puente de Cabezuela, desmontes y muros del Puerto de Tornavacas, casillas de peones camineros...).

Portada de la presentación de la ponencia. Trujillo, 26 de septiembre de 2025.

    El trabajo al completo será publicado en los próximos meses por parte de la Asociación Cultural Coloquios Históricos de Extremadura, entidad organizadora del que ya es un encuentro de referencia, con 54 ediciones a sus espaldas, para la Historia de Extremadura.

Premio Especial LIV Coloquios Históricos de Extremadura

Más información en:

Los Coloquios Históricos finalizan con la entrega de sus premios y con el viaje cultural (Diario HOY, 29/09/2025)

Un trabajo de investigación sobre las comunicaciones en el Valle del Jerte, premiado en los LIV Coloquios Históricos de Extremadura 

viernes, 5 de septiembre de 2025

PARTICIPACIÓN EN LOS COLOQUIOS HISTÓRICOS DE EXTREMADURA (LIV EDICIÓN)

    Del 22 al 28 de septiembre se celebran en Trujillo los Coloquios Históricos de Extremadura. En esta edición, la LIV -que está dedicada a los viajes y viajeros por Extremadura en el III centenario del nacimiento de Antonio Ponz Piquer-, participo con la ponencia "La primera vía de comunicación moderna del Valle del Jerte (la carretera de Plasencia a El Barco de Ávila) y sus precedentes históricos (Camino Real y caminos de herradura)", la cual está programada para el viernes 26 a las 18:50 h. 

Resumen de la ponencia 

El objetivo principal de este trabajo es poner en valor la que fue la primera carretera moderna que discurrió por el Valle del Jerte: la que conectó Plasencia con El Barco de Ávila, cuya construcción, partiendo desde el primer núcleo, comenzó a mediados de la década de 1880 y finalizó ya bien entrada la de 1910, llegando hasta la localidad abulense bañada por el Tormes. Siendo actualmente la carretera Nacional 110 (que une Plasencia con Soria), de titularidad estatal, la arteria principal de comunicación del valle, esta nueva vía vino a mejorar las comunicaciones existentes entre las diferentes poblaciones de la comarca –que, hasta entonces, estaban conectadas por el camino real, por los seculares caminos de herradura así como por otros secundarios, de menores dimensiones–  y, sobre todo, facilitó la circulación de viajeros, de caballerías, de carruajes y de los futuros automóviles, entre estos dos puntos tan importantes del norte de Cáceres y del sur de Ávila, respectivamente. Además, por la importancia histórica que han tenido estos caminos que ya existían mucho antes de la construcción de la carretera, también les dedicamos un apartado, pues estos, durante siglos, han sido las principales vías de comunicación utilizadas por lugareños, foráneos, así como por todo tipo de animales que, además, conectaban unos pueblos del valle con otros y este con sus espacios geográficos más próximos.

Cartel anunciador de la LIV edición de los Coloquios Históricos de Extremadura

Programa completo del viernes 26 de septiembre de 2025 

 VIERNES, 26 DE SEPTIEMBRE DE 2025
Moderador: D. Francisco Javier Rubio Muñoz


17:00 Teodoro MARTÍN MARTÍN
La imagen de Extremadura en los Elogios Poéticos de Francisco Gregorio de Salas.


17:25 Teodoro Agustín LÓPEZ LÓPEZ
Fundaciones eclesiásticas en Fuente del Maestre (III).


17:50 Jesús ALONSO DÁVILA
Viaje al Monasterio de Guadalupe del rey Don Sebastián. Diciembre, 1576 – Enero, 1577.


(18:15-18:25) Receso


18:25 Manuel RUBIO ANDRADA
Grabado rupestre del Molinillo. Un panel de huevos mágicos. Casas de D. Pedro (Badajoz).


18:50 Juan Pedro RECIO CUESTA
La primera vía de comunicación moderna del Valle del Jerte (La carretera de Plasencia a El Barco de Ávila) y sus precedentes históricos (Camino Real y Caminos de Herradura)


19:15 José PASTOR VILLEGAS, Jesús Francisco PASTOR VALLE
En el tricentenario del nacimiento del español ilustrado Antonio Ponz Piquer (1725-2025): vuelo humano en Plasencia en el siglo XVI y globo aerostático en Versalles.


(19:40- 19:50) Receso


19:50 María Dolores FIDALGO CASARES
Pizarro. Las “revisitaciones” del héroe: de Velaochaga y Gamarra a “La línea de la Gloria” de Ferrer-Dalmau.

Más información en:

Página web de los Coloquios Históricos de Extremadura

Trujillo acoge la LIV edición de los Coloquios Históricos de Extremadura, dedicados a viajes y viajeros (El Periódico Extremadura, 19/09/2025) 

Los Coloquios Históricos empiezan el lunes y contarán con 30 ponencias en Trujillo (Diario HOY, 20/09/2025) 

 

miércoles, 3 de septiembre de 2025

COLABORACIÓN EN "AL HIGUÍN". REVISTA DIGITAL DE CULTURA TORNAVAQUEÑA

    Dentro de las actividades llevadas a cabo dentro de la programación del Agosto cultural tornavaqueño, desde el Ayuntamiento de Tornavacas -y de manera especial por la iniciativa particular del actual gestor cultural Luis Pelaz Gil-, se ha promovido la edición de una revista por y para Tornavacas, titulada "Al higuín". Revista digital de cultura tornavaqueña

Portada de la revista

    En ella colaboramos con el artículo "Algunos lugares, edificios y proyectos de construcción de la Tornavacas de 1890", ya publicado en una anterior entrada de este mismo blog.

Extracto del artículo

    La revista, que contiene otras muchas e interesantes aportaciones de vecinos, puede consultarse en el siguiente enlace

Índice de contenidos de la revista  

    Esperamos que este número sea el primero de muchos, pues esta revista es un lugar, como se dice en su editorial, "en donde los tornavaqueños puedan acudir para mostrarnos al resto lo que hace, lo que siente, lo que necesite expresar". 

COLABORACIÓN EN LA REVISTA DE CAÑAMERO (Nº 8) DEL AÑO 2025

Un episodio de la Tercera Guerra carlista en Cañamero (verano de 1875)

Artículo de divulgación publicado en la Revista de Cañamero (nº8, 2025) sobre un episodio ocurrido en aquella localidad en el verano de 1875 en el contexto de la Tercera Guerra carlista (1872-1876)

Puede leerse a continuación: https://www.academia.edu/143772308/Un_episodio_de_la_Tercera_Guerra_carlista_en_Ca%C3%B1amero_verano_de_1875_

 
Portada e Índice de contenidos de la Revista

viernes, 1 de agosto de 2025

HISTORIAS DE TORNAVACAS (XXIV): LA TORRE DEL RELOJ DEL AYUNTAMIENTO DE TORNAVACAS

Postal del año de 1970, de la Plaza del Ayuntamiento (oficialmente Plaza Mayor) de Tornavacas (por aquel entonces, aún en el franquismo, llamada Plaza de José Antonio)

    Son muchas las historias que se podrían contar simplemente con observar esta bonita postal con la que iniciamos esta nueva entrada. Historias de la fuente, de la popularmente conocida como "Calzadilla", lugar de encuentro imprescindible del ayer y del hoy, de los animales por las calles -como la gallina que aparece junto a la fuente-, de las solanas de las casas o de la niña que, con dos cubos, está subida en la fuente. Como dice el refrán, una imagen vale más que mil palabras y así queda demostrado en esta postal.
 
Pero la pequeña historia en la que nos vamos a detener en esta nueva entrada de HISTORIAS DE TORNAVACAS, tiene que ver con la torre del reloj del Ayuntamiento, que ya es un emblema del edificio desde hace mucho tiempo. 
 
    Nuestro Ayuntamiento, construido en las primeras décadas del siglo XVIII -siglo del que también son otras de las muchas construcciones destacadas que nos encontramos por la Calle Real-, originalmente no contaba con esa torre, que es un añadido posterior, ya de finales del siglo XIX. 
 
    Y es que, según constan en los registros del Ayuntamiento, en octubre de 1889 y por valor de 3.060 pesetas -una cantidad muy importante para aquella época-, la corporación compró al famoso maestro relojero Antonio Canseco, quien vendió centenares de relojes de estas características a cientos de municipios de toda España, tanto el reloj como el pequeño campanario de hierro, así como la campana, que aún hoy día sigue existiendo en la parte superior de la torre. Esta compra fue autorizada por parte del Gobernador Civil de la provincia, pues en la sesión del 25 de agosto de 1889, el Alcalde, Bonifacio Navarro García, informaba que el Ayuntamiento quedaba autorizado "para que sin las formalidades de subasta, adquiera un reloj de Torre de los que goza privilegio de invención el industrial D. Antonio Canseco, vecino de Madrid, acordando formalizar el contrato con dicho Sr. e incluir el importe en el presupuesto correspondiente".
 
Extracto del acta de la sesión del 25 de agosto de 1889 en donde se da el visto bueno para la compra del reloj. 
 
    Una vez adquirido, sabemos que a principios de la década de 1890 (década en la que también se realizaron otras importantes obras en Tornavacas como la construcción del nuevo cementerio de Las Espozas -terminado en 1892- o la Escuela de Niñas -proyectada en 1891-), la torre ya estaba construida y en el mismo año de 1890 se llevó a cabo la instalación del reloj, del campanario de hierro y de la campana, pues en la sesión ordinaria del 26 de octubre de 1890, el Alcalde -en este caso ya Ramón Núñez Armella- planteaba la necesidad de "construir una buhardilla para dar acceso a la torre en que se halla colocado el reloj".
 
    Desde ese momento hasta la actualidad, tiempo en el que han transcurrido 135 años, muchas son las anécdotas relacionadas con este reloj, con su funcionamiento o con su mecanismo (que hoy se encuentra en el actual CIRV de Las Cárceles, en lo que era el pasillo de acceso a los antiguos calabozos), como las que muy seguramente recuerdan nuestros paisanos que han desempeñado el cargo de Alguacil, los responsables municipales o las decenas de trabajadores que han pasado por el Ayuntamiento a lo largo de estas últimas décadas. Tan solo un ejemplo: nuestro paisano Ramón Marcos Sánchez, que tiene 94 años en el momento que se escriben estas líneas y que desempeñó el cargo de Alguacil durante casi tres décadas (desde 1979 hasta 1995), recuerda cómo él subía frecuentemente a la torre a dar cuerda al reloj así como sus averías, que eran también frecuentes, teniendo que venir diferentes relojeros, a menudo, a repararlo. Y este motivo fue el principal por el que el reloj dejó de funcionar y ya, hace apenas unos años, se acabó retirando la maquinaria de su ubicación original -lo que sucedió en los últimos años del segundo mandato de José Antonio Recio Santos-. Una vez bajada de la torre, se llevó a cabo su restauración por parte de la empresa Relojes de Torre López (de Los Navalucillos, provincia de Toledo). En todo este proceso, hemos de mencionar a nuestra vecina Puri Martín de la Cruz, entonces concejala de Cultura y Festejos, de quien partió la iniciativa de restaurar la maquinaria del reloj, que ya se encontraba en desuso desde hacía años en el interior de la torre.
 
    Anécdotas y curiosidades relacionadas con el reloj que también forman parte de la Historia de Tornavacas y a las que, sin duda, dedicaremos la atención que merecen, porque ahora, para finalizar esta entrada, lo hacemos con algunas imágenes de interés de la torre y del reloj.
 
Vista del interior de la torre y de la cara interior del reloj

Vista interior de la torre, en donde se pueden observar gran parte de los materiales originales empleados en su construcción (ladrillos de barro cocido y revestimiento de sus paredes a base de mortero de cal)

Maquinaria que hacía funcionar el reloj, adquirida en 1889, y que ahora se puede visitar en el actual Centro de Interpretación y Recepción del Visitante (CIRV) "Las Cárceles"

Detalle de la maquinaria, en donde aparece el nombre de su fabricante: Canseco. En ella, en su extremo izquierdo, también se puede observar una pegatina del relojero Javier López Martínez que se encargó de su restauración.
 
Fachada del Ayuntamiento y Torre del Reloj. Década de 1960.
Vista general de la Plaza, en donde se puede observar la fachada del Ayuntamiento así como la torre del reloj. Década de 1960.

Vista actual de la fachada del Ayuntamiento y de la torre. Domingo 22 de junio de 2025, coincidiendo con la celebración, por la tarde, del Corpus Christi

Iluminación nocturna del Ayuntamiento y de la torre. 26 de julio de 2025.

domingo, 20 de julio de 2025

HISTORIAS DE TORNAVACAS (XXIII): SUCEDIÓ UN 20 DE JULIO... PERO DE 1936

    Tal y como ya quedamos recogido en una de nuestras anteriores entradas dedicada al antiguo puente que existía para cruzar, de un lado a otro, la Garganta Becedas, el 20 de julio de 1936, tan solo dos días después de iniciarse la Guerra Civil a consecuencia de un golpe militar fallido, este puente fue objeto de una acción de sabotaje por parte de militantes de izquierda y de varios vecinos de Tornavacas. La finalidad de dicha acción era impedir el paso de las tropas "nacionales" o franquistas que se dirigían desde Plasencia hacia Ávila para controlar las poblaciones de la zona a su paso. Este puente, por aquel entonces, se encontraba en muy malas condiciones después de haberse visto muy afectado por el temporal de lluvias que tuvo lugar en diciembre de 1935.

Restos del puente antiguo sobre la Garganta Becedas que fue objeto de sabotaje el 20 de julio de 1936

    Inicialmente, el plan era volarlo por completo para evitar el tránsito de las tropas, falangistas y demás fuerzas adictas al bando franquista, pero finalmente lo que se hizo fue arrojar a la garganta algunos de sus elementos (barandillas, piedras, tablas de madera y otros de su superficie...) que impidieron, aunque tan solo por unas horas, el paso de vehículos y carruajes movidos por animales. 

    Los tornavaqueños que inutilizaron el puente, así como los que les ayudaron, fueron arrestados, enviados presos a Plasencia y algunos de ellos no salieron de la cárcel con vida, pues tras ser sometidos a un estricto proceso judicial por la vía militar -Consejo de Guerra-, los paisanos Ramón Martínez Bermejo, secretario de Radio Comunista, Julio Crespo Cuesta, presidente de Radio Comunista y Zenón Pelaz Cuesta, presidente de la Casa del Pueblo y concejal del ayuntamiento tornavaqueño, fueron fusilados en Plasencia en diciembre de ese mismo año.
    Otros tres tornavaqueños, también encausados en este proceso por "auxilio a la rebelión", fueron condenados a prisión (inicialmente, a 12 años y 1 día), cumpliendo parte de la pena impuesta tanto en la cárcel de Plasencia como en el presidio de Cuéllar (Segovia), lugar en el que permanecieron varios años hasta que fueron puestos en libertad, tal y como se muestra en esta ficha personal de uno de los procesados por este hecho ocurrido en Tornavacas en aquel 20 de julio de 1936.
 
Ficha de uno de los encausados que permaneció preso en el penal de Cuéllar (Segovia). Archivo General de la Administración (Alcalá de Henares, Madrid) 

Continuará...

sábado, 10 de mayo de 2025

PARTICIPACIÓN EN EL I CONGRESO INTERNACIONAL DE JÓVENES INVESTIGADORES DE LA UEX "NUEVAS VOCES EN LA HISTORIA"

Los días 9, 10 y 11 de junio, en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Extremadura (campus de Cáceres), se celebrará el I Congreso Internacional de Jóvenes Investigadores de la UEx "Nuevas voces en la Historia", en el cual participamos con la comunicación titulada: "El carlismo en la ciudad de Cáceres durante la Segunda República (1931-1936)" (Primera mesa de comunicaciones del lunes 9 de junio). 

Adjuntamos el programa de dicho Congreso.



jueves, 13 de febrero de 2025

EL PUENTE DE CABEZUELA DEL VALLE: LA OBRA DE INGENIERÍA MÁS IMPORTANTE DE LA CARRETERA DE PLASENCIA A EL BARCO DE ÁVILA A SU PASO POR EL VALLE DEL JERTE

    En entradas anteriores ya dedicamos unas líneas al puente que, sobre el río Jerte, existe en Cabezuela del Valle, pues es uno de los elementos materiales más singulares que actualmente se conservan de la construcción, a su paso por el Valle del Jerte, de la que, en su origen, era conocida como la carretera de Plasencia a El Barco de Ávila (actual N-110). Este puente, por sus características y dimensiones, fue una de las obras de ingeniería más importantes de dicha carretera, primera vía de comunicación moderna que se construyó en nuestra comarca a lo largo de las últimas décadas del siglo XIX y las primeras del siglo XX y a la que ya, en meses anteriores, hemos dedicado también un par de entradas en este blog (Los inicios de la construcción de la carretera de Plasencia a Barco de Ávila -actual Nacional-110- a su paso por el Valle del Jerte y Un paseo por los orígenes de la N-110 a su paso por el Valle del Jerte (I): algunos restos materiales de la antigua carretera de Plasencia a El Barco de Ávila).

    Este puente, que hoy, diariamente, soporta el tráfico de centenares de vehículos y de viandantes y que así seguirá siendo hasta la terminación del nuevo que le sustituirá como puente principal y que estará operativo en 2026, bien merece que le dediquemos una entrada en exclusiva por varios motivos: por su valor histórico, por la importante obra de ingeniería que representa y por el emblema que ya es para el Valle y, en especial, para los habitantes de Cabezuela.

    Y es que, este puente tiene tras de sí una curiosa e interesante Historia que se remonta a varios siglos atrás. El que actualmente conocemos, como a continuación detallaremos, adquirió su aspecto actual en los inicios de la década de 1910, que es cuando fue finalizada su construcción, pero en siglos anteriores también existió en ese mismo lugar un puente que era utilizado para cruzar, de un lado a otro, el río Jerte. Veamos algunos datos curiosos que así lo demuestran. Aunque algunas informaciones no contrastadas indican que este puente puede tener un posible origen romano, ya sí está documentada la existencia de un puente en este lugar en la Edad Media, que servía para cruzar el río a viandantes, arrieros, caballerías, trajinantes y al ganado, el cual debía de pagar una tasa ("pontazgo") por pasar por él. Esta misma función tendría también durante los siglos de la Edad Moderna. Y es a finales de esta época, es decir, del siglo XVIII, cuando ya tenemos las primeras referencias sólidas a este puente. Ellas aparecen en la documentación relacionada con el proyecto del Diccionario Geográfico de España impulsado por el geógrafo Tomás López en las últimas décadas del siglo XVIII. Más concretamente, en un mapa de 1797 asociado a este proyecto, ya observamos que se refleja un paso que cruza el río Jerte muy cerca del núcleo de población de Cabezuela que, indudablemente, se trata de este puente.

Detalle del mapa geográfico del Obispado de Plasencia elaborado por Tomás López (1797). Aparte de la referencia al nombre de las poblaciones, señalamos, con el círculo verde, dicho paso sobre el río Jerte Biblioteca Nacional de España

    Ya en el siglo XIX empezamos a tener un mayor número de informaciones sobre este puente, pues aparece referenciado en varios diccionarios escritos durante este siglo así como en una importante obra de 1866 que detallaremos a continuación. En cuanto a las referencias que encontramos en los diccionarios mencionados, hay que destacar las siguientes. En el Diccionario geográfico-estadístico de España y Portugal, de Sebastián Miñano y publicado en 1826, se dice: 

"Hay un Cabezuela un bonito puente de un solo arco unido por la orilla izquierda con las mismas casas; y por la derecha con una devota capillita de Cristo Crucificado, formada sobre la misma cabeza del puente en la orilla derecha"

    Por otra parte, en el ya imprescindible Diccionario geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de Ultramar de Pascual Madoz (Tomo V, 1849), en la entrada relativa a Cabezuela se nos dice:

"Le baña de N. a S. el r. Jerte que pasa inmediato a sus casas, en cuyo punto tiene un buen puente de piedra de un solo arco muy elevado"

    Por lo que respecta a la obra de 1866 ya citada, titulada Itinerario descriptivo militar de España, la cual es imprescindible para conocer el estado de muchos caminos que existían en España, la información que en ella viene (en su Tomo V), es muy interesante para conocer el itinerario del camino, así como el estado en el que este se encontraba, que conectaba Plasencia con El Barco de Ávila y que transcurría por nuestro valle. En la descripción de este camino, además de hacerse referencia a los puentes, arroyos y lugares destacados por los que transitaba, aparece una nueva referencia al puente de Cabezuela, señalándose de él lo siguiente:

"A la salida de Cabezuela se pasa el Jerte por un antiguo puente de piedra de un arco"

Extracto de la obra de 1866 en donde, al describir el camino de Plasencia al Barco de Ávila, se hace referencia al puente de piedra de Cabezuela

    Pero es en las últimas décadas del siglo XIX cuando arranca la Historia del puente tal y como nosotros actualmente lo conocemos. Como también dejamos escrito ya en otra de nuestras anteriores entradas, en 1877 se promulgó la conocida como Ley de carreteras en la que ya aparecía proyectada la carretera de "Plasencia al Barco de Ávila (Ávila) por Navaconcejo, Cabezuela y Puerto de Tornavacas", cuya construcción se realizó, por secciones o "trozos", a lo largo de las siguientes décadas (entre la de 1880 y 1910). En la Historia de esta carretera, capítulo aparte merece el proyecto de reforma y ensanche del puente viejo de Cabezuela. Ya a la altura de 1900, cuando estaba prácticamente terminado el tramo de carretera entre Plasencia y Cabezuela, fue cuando se comenzaron a preparar las obras de reforma y ensanche del puente de piedra.

    Gracias a la documentación hallada en el Archivo General de la Administración (Alcalá de Henares, Madrid), sabemos mucho más de lo que sabíamos hasta ahora sobre la construcción del puente, pues allí se conservan los expedientes relativos a la construcción de todos los tramos de la carretera de Plasencia a El Barco de Ávila así como de las obras auxiliares (alcantarillas, muros, puentes...) que debieron hacerse. Por su interés, y por el valor que tienen para conocer con más profundidad el proyecto del nuevo puente, en los párrafos siguientes nos vamos a detener en algunos de estos documentos.

    Volviendo a nuestra narración, como decíamos, a la altura del año 1900 ya estaba construido, casi en su totalidad, el tramo de la carretera que discurría entre Plasencia y Cabezuela. Y ya en 1901 se ofertaba en prensa uno de los primeros servicios de transporte regular que conectaban ambas localidades por la nueva carretera: el coche correo diario movido por tracción animal, servicio del que ya escribimos unas líneas que pueden leerse en este enlace.

Detalle de un plano de Cabezuela del año de 1901. En él se observa el casco urbano de la localidad, la ya recién construida carretera, la casilla del peón caminero, la referencia a la ubicación original de la ermita del Cristo y la referencia al puente de piedra. Fuente: Centro de Descargas del Instituto Geográfico Nacional

Coche correo diario de Plasencia a Cabezuela, y viceversa, movido por tracción animal. Anuncio de 1901.

    Llegando ya la carretera hasta Cabezuela, fue cuando se empezó a tratar la obra de reforma y ensanche del puente, una obra totalmente necesaria para hacer apta esta infraestructura para las nuevas necesidades que no tardarían en llegar, pues esta carretera ya se concibió para que, en un futuro no muy lejano, por ella pudieran circular también los primeros automóviles, aparte de los carruajes y caballerías que eran -y siguieron siendo- los medios de transporte más habituales en nuestra zona a finales del siglo XIX y durante, al menos, las tres primeras décadas del siglo XX, momento a partir del cual ya comenzaron a circular tímidamente por nuestra carretera los vehículos a motor.

    Por las características y singularidad de las obras en dicho puente, se redactó un proyecto aparte para la ejecución de las mismas. Este proceso comenzó en los primeros años de la década de 1900 con la redacción y aprobación de los primeros proyectos de obras, las cuales se alargarían hasta 1910, que es cuando se culminó la estructura del nuevo puente. Por su interés, adjuntamos algunos de los planos que sirvieron para la construcción del mismo así como algunos detalles de la parte inferior del puente, que también quedaron reflejados en dichos planos.

Expediente de valoración definitiva y liquidación final del ensanche del puente de Cabezuela (1915), que es donde se insertan los planos del puente, que se muestran a continuación, construido en los años anteriores

Plano del puente del "frente de aguas arriba"  

Plano de los estribos y de los arranques de la bóveda

Anchura del puente. 6 metros y 3 centímetros entre la calzada y los andenes volados. La anchura de la calzada era de 4 metros y 40 centímetros 
 
 

Detalle de la barandilla y de los bolardos colocados en los extremos del puente. Las barandillas se instalaron como medida de seguridad para los vehículos, las personas y las reses mayores, pues "por el puente pasa el cordel de ganados".
 
    Con la estructura del puente ya finalizada, en julio de 1910 se realizaron las pruebas de carga de los andenes volados, a modo de pasos peatonales, que se construyeron con hormigón armado a la vez que se realizaba el ensanche del puente. Dichas pruebas, para comprobar la resistencia de los mismos, consistieron en la carga de 400 kilos de tierra por metro cuadrado que permanecieron allí -entre las barandillas y sacos de tierra a ras de la calzada-, tal y como se indica en el croquis que a continuación se muestra, por un tiempo de 24 horas.
 
Informe de las pruebas de carga de los andenes volados realizadas en julio de 1910

    Como vimos y ya analizamos en nuestra anterior entrada, en la actualidad aún siguen siendo bien visibles los restos materiales originales de aquel puente construido a principios del siglo XX. En su proceso de construcción y ensanche, también es de interés destacar que se aprovecharon los materiales existentes del puente viejo de piedra (su enlosado, la sillería del petril y la mampostería de los tímpanos) y se introdujeron nuevos como el hierro, el mortero, el hormigón hidráulico o el hormigón armado, que sirvieron para reforzarlo y adaptarlo a los nuevos tiempos. Además, se aprovecharon parte de los grandes bloques graníticos de los alrededores ("canchales") para extraer de ellos -a base de barrenos y picos- bloques rectangulares de piedra, que son también visibles en la base del puente así como en los muros construidos en sus laterales.

Informe de 1915 en donde se especifican los materiales y técnicas empleados en las obras de reforma y ensanche del puente

Detalle de los elementos constructivos del puente desde el cauce del río (muro de bloques de granito y andenes volados)

Detalle de los bloques de granito en uno de los arranques (bases)

 
Detalle de uno de los muros de contención en uno de los laterales del puente. Vista desde el cauce del río.

    Para ir finalizando, también mencionar que la ejecución de las obras de la carretera en las proximidades del puente conllevó alterar las construcciones que existían allí hasta entonces: en la margen izquierda del río, la que está dentro del casco urbano, se tuvieron que expropiar y derribar algunas viviendas para ejecutar el trazado de la vía -cuestión que llevó años-. Y en la margen derecha, dirección hacia Jerte, se tuvo que trasladar la ermita del Cristo, desplazándola unos metros más al norte, que es donde se ubica en la actualidad.

Vista de la carretera a su paso por Cabezuela y puente de la misma localidad. Primeros años de la década de 1950. Fuente: fotografías del Valle del Jerte existentes en el Archivo Histórico Provincial de Cáceres

    El puente de Cabezuela, emblema del municipio y, por extensión, de la comarca del Valle, pronto dejará de tener la función de puente principal que ha tenido durante siglos. Esperemos que el menor volumen de tráfico que soportará cuando comience a utilizarse el nuevo, redunde en su mejor conservación. Como una infraestructura singular que es, a todos nos corresponde apreciar y poner en valor este puente, pues motivos para ello tiene: por su indudable valor histórico y por ser el de mayor envergadura que existe en toda la comarca que cruza, de un lado a otro, el río Jerte.

Recreación virtual del aspecto que tendrá el nuevo puente que ya está en construcción. Adiante Infraestructuras, empresa adjudicataria de la obra.